Una visa de trabajo y una visa de residencia permanente son dos tipos diferentes de visas que sirven para diferentes propósitos.
Una visa de trabajo, como una visa H-1B, es una visa de no inmigrante que le permite a un ciudadano extranjero venir a los Estados Unidos por un período de tiempo temporal para trabajar para un empleador estadounidense en un trabajo u ocupación específica. El período de tiempo que un ciudadano extranjero puede permanecer en los Estados Unidos con una visa de trabajo generalmente es limitado y la visa puede estar sujeta a renovación o extensión.
Por otro lado, una visa de residencia permanente, como una tarjeta verde, permite que un ciudadano extranjero viva y trabaje en los Estados Unidos de forma permanente. Los titulares de la tarjeta verde pueden trabajar para cualquier empleador en los Estados Unidos. y pueden permanecer en los Estados Unidos. siempre y cuando mantengan su estado de residencia permanente. Los titulares de la tarjeta verde también pueden ser elegibles para solicitar la ciudadanía estadounidense después de cumplir con ciertos requisitos.
Mientras que una visa de trabajo es temporal y está vinculada a un trabajo o empleador específico, una visa de residencia permanente brinda más beneficios a largo plazo y permite una mayor flexibilidad en términos de trabajo y viajes. Sin embargo, obtener una tarjeta verde puede ser un proceso más largo y complejo que obtener una visa de trabajo y puede requerir cumplir con requisitos de elegibilidad adicionales.
