En un caso de lesiones personales, puede tener derecho a daños económicos y no económicos por el daño que ha sufrido. Los daños económicos son daños que se pueden cuantificar y calcular, como gastos médicos, salarios perdidos y daños a la propiedad. Los daños no económicos, por otro lado, son daños que son más difíciles de cuantificar y se relacionan con pérdidas intangibles, como dolor y sufrimiento, angustia emocional y pérdida del disfrute de la vida.
Aquí hay algunas razones comunes por las que puede tener derecho a daños no económicos:
- Dolor y sufrimiento: Es posible que tenga derecho a una indemnización no económica por el dolor y el sufrimiento físicos que haya soportado como resultado del accidente o la lesión.
- Angustia emocional: puede tener derecho a daños no económicos por la angustia emocional que ha sufrido, como ansiedad, depresión y pérdida del disfrute de la vida.
- Pérdida de consorcio: si sus lesiones han afectado su capacidad para disfrutar de una relación normal con su cónyuge, es posible que tenga derecho a daños no económicos por pérdida de consorcio.
- Desfiguración o cicatrices: si sus lesiones han resultado en una desfiguración o cicatrices permanentes, es posible que tenga derecho a daños no económicos.
La cantidad de daños no económicos a los que puede tener derecho dependerá de los hechos específicos de su caso y del alcance de sus lesiones. Es importante trabajar con un abogado con experiencia en lesiones personales que pueda ayudarlo a comprender sus derechos y opciones legales y buscar un acuerdo o veredicto justo que tenga en cuenta los daños económicos y no económicos.